Experiencias periodísticas
Por Juan Carlos Céspedes A.
De las tantas actividades que he tenido en la vida, una fue de analista de hechos internacionales, y aprendí en esto, lo complejo de opinar de política internacional sin estar bien informado para ello. Entender que pocas noticias no están manipuladas por las centrales de inteligencia de los países, que hay "prestigiosos" periodistas pagados por gobiernos, que uno no se puede quedar solo con los flash informativos.
Siempre, antes de analizar una noticia, que no repetir, acudía a la historia, gran fuente para tener una noción más o menos ajustada a la verdad, porque allí están los hechos y datos necesarios para comprender la realidad y poder hablar con veracidad.
Desde entonces entendí el papel de la OTAN, de la ONU, etc., que detrás de lo aparentemente evidente, se esconden hechos maquillados, manipulados, (son expertos en manejar la sensibilidad de la opinión pública), que juegan al macartismo, que demonizan al oponente, y todo lo que sea necesario, porque saben que una guerra puede ganarse en los escritorios, la radio, los televisores, etc., porque "la primera victima de una guerra es la verdad", frase atribuida a tanta gente que ya no se sabe quién es el verdadero autor, y lo más importe, entendí que debía voltear la moneda para poder comprender la verdad-verdadera, es decir, todo el contexto, de quitarme la mirada occidentalizada, pues no es la única, solo así podía acercarme mínimamente a comprender la totalidad del hecho político, no solo nacional, sino internacional, como son las noticias que en esta ocasión convulsionan al mundo.